¿Sabes cómo preparar tu moto para el verano?

Si hay una estación del año para disfrutar de la moto en todos sus sentidos, es el verano. Tenemos más tiempo libre, buen clima, sensación de libertad, ganas de desconectar, vacaciones… todo lo que necesitamos para ponerla en marcha y exprimirla al máximo.

Para que podáis disfrutarla sin problemas técnicos, ni sorpresas, hemos preparado una pequeña guía para que tu moto esté perfecta durante este período estival.

- El primer paso es: Lleva tu moto al taller para una revisión.

Te recomendamos que la lleves a tu taller de confianza antes de utilizarla para que detecte o descarte averías, sobre todo si has pasado mucho tiempo sin circular con ella. En este sentido, siempre es mejor prevenir que curar. 

- Tanto si la llevas al taller como si la pones a punto tu mismo, lo primero que hay que revisar es: La batería.

Esta sufre, principalmente, cuando se enfrenta a largos periodos de inactividad, por lo que, si eres de sacar la moto solo por vacaciones, quizás te toque cargarla o, directamente, cambiarla.

- Para comprobar si el motor arranca o no, debemos asegurarnos que el depósito tenga gasolina. 

No olvides que, si tu moto lleva años parada, puede que el combustible se haya estropeado, compruébalo.

- Continuaremos revisando los neumáticos.

Se trata de la parte más importante de nuestra moto porque es la que nos mantiene en contacto con el suelo. Por ese motivo es importante observar que el dibujo no esté desgastado. Si los tacos están gastados irregularmente, deberás revisar la presión del aire y corregir, si es necesario. Si los neumáticos están secos por llevar mucho tiempo sin usar, deberás cambiarlos. 

- Otro aspecto importante a tener en cuenta son los frenos.

Siempre hay que revisar las pastillas de freno, un desgaste irregular puede ser fatídico.

- Si decidimos revisarlo todo nosotros mismos, es importante fijarnos en la cadena, el cardán y la correa dentada.

En el caso de la cadena, debemos mirar que no esté sucia y si es necesario, engrasarla. En el caso del cardán, revisamos que no haya ningún líquido chorreando. Por último, en caso de la correa dentada, simplemente debemos revisar que esté tensa y en su sitio.

- No podemos ponerla en marcha sin comprobar los niveles de líquidos.

Debemos fijarnos bien en el aceite del motor, el líquido de frenos y el líquido refrigerante, en caso de llevarlo.

- Por último comprobaremos la iluminación y la señalización.

Una vez que la ponemos en marcha, debemos comprobar los intermitentes, las luces de freno, las luces de carretera y las de cruce.

Ahora sí, una vez comprobado que tenemos todos los papeles en regla: seguro, ITV e impuesto de circulación, ya podemos disfrutar de los viajes en moto todo el verano.

¡Que paséis unas felices vacaciones sobre dos ruedas!